Deberemos analizar si el nuevo mercado es el mismo q el anterior a las vacas gordas. Seguro q no. Los clientes han vivido muchas experiencias nuevas, han probado muchos productos, seguro q sus criterios de elección han cambiado. Seguro q sus expectativas son distintas.
Otra opción es transformar la empresa. Entiendo por transformar, una reflexión abierta en torno a propuestas de innovación y su posterior implantación. Estas propuestas deben partir de todas las personas de la empresa y por supuesto de los clientes. Pero como no buscamos "seguir haciendo lo mismo", preguntaremos también a los no - clientes. Digo yo q pensando, alguno podremos captar. Este nuevo mercado, supone un cambio en los atributos determinantes de los productos o servicios. ¿Estamos posicionados en base a ellos? .
La velocidad de cambio de los mercados, se esta acelerando a la velocidad de la luz. Las empresas no pueden subsistir añadiendo o quitando una línea o turno de producción. Debemos transformarlas, en empresas flexibles capaces no ya de adaptarse a los cambios, sino capaces de saber vislumbrar los cambios. Tarea difícil q no por ello nos debe hacer renunciar. Ello no debe significar basar la estrategia en el corto plazo, en apagar fuegos. La estrategia debe ser sostenible y a largo plazo, pues es la única forma de alcanzar una rentabilidad adecuada. Tampoco se trata de crear y matar empresas constantemente para vivir del efecto champan.
Debemos cuestionarnos el modelo de empresa actual (seguro q es vertical), el binomio producto - cliente. ¿Tan imposible es convertir al no cliente en cliente de ese producto?. La incorporación de procesos de innovación, traerá un cuestionarse todos los procesos, una búsqueda de nuevos productos, de nuevos usos de los actuales, de nuevos mercados, de nuevos clientes. El adaptar la empresa al pasado, pensando q con ello sobreviviremos a las vacas flacas, nos llevará a la obsolescencia, a ser como la tienda de la esquina donde solo queda el dueño.
Totalmente de acuerdo. El mundo no saldrá de esta crisis tal y como entró en ella. Para sobrevivir, las empresas no pueden encerrarse más y más en lo que saben hacer. Tendrán que aprender a salir fuera de su entorno habitual, con nuevos productos y nuevas estrategias. A lo que señalas, Augusto, tan sólo añadiría una fórmula: las empresas españolas tienen que entrar en la era de la gestión del conocimiento.
ResponderEliminarHola, Augusto.
ResponderEliminarNo sabía de tu nuevo proyecto de blog. Ánimo con ello.
Respecto a los temas que comentas, me parece cierto todo lo que dices. Pero las empresas empresas cada vez más se preguntan no tanto el qué (transformación en la línea propuesta, que parece ir estando claro) sino el cómo: ¿Cómo se consigue, cómo se innova, cómo se transforma?
Ese es el problema querido la gestión del conocimiento. Están las empresas preparadas para ejercer la gestión del conocimiento?, o hemos estado inmersos en el devenir de los tiempos creyendo que sin hacer nada ya estaba bien, hasta quedarnos obsoletos y sin recursos??. Creo que es necesario pararse a pensar un rato , dejar la improvisación y empezar a abandonar las estructuras verticales, aprovechar las ventajas que nos ofrecen generaciones preparadas y crear equipos profesionales con autonomía suficiente en sus dependencias.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo, Augusto; pienso que la clave de la empresa actual es la reinvención continua y la flexibilidad.
ResponderEliminarEnhorabuena por el blog y ánimo,
http://reinbizz.blogspot.com/2009/10/reinventando-las-lagrimas-en-la-lluvia.html
Hola Augusto,
ResponderEliminarme parece genial que gente como tu se dedique hablar del futuro y del cambio dando el enfoque con el que estoy de acuerdo, las viejas formulas ya no sirven el mercado ha cambiado, el cliente ha cambiado y las necesidades y la forma de satisfacerlas han cambiado, todo ha sido demasiado rapido y quizas los momentos actuales vengan bien para detenerse a pensar,analizar y prepararse para el futuro.